Marzo, 2018
A veces la monotonía, o la simple carencia de algo que nos mantenga en movimiento, es mucho mejor que el exceso de sentimientos...
Ni si quiera escribo en mi diario, aunque supongo que me limitaré a pegarle estas páginas encima si es que conseguimos salir de aquí. Supongo que necesitaba desahogarme de algún modo, y esto siempre me ha ayudado.
Me siento...desbordada. Desbordada y cansada. Antes todo era más sencillo, cierto es que no me lo parecía en su momento y que solo deseaba salir de allí, pero al menos tenía un camino marcado, sabía lo que quería, o eso pensaba, y mis días tenían una rutina que en cierto modo era fácil de seguir.
No es que no recuerde los buenos momentos que he tenido en estos años, porque esas vivencias estarán conmigo por siempre, pero sigo preguntándome una y otra vez si no estaba mejor antes, si no era todo mejor cuando nadie me importaba y solo estaba yo. Desde luego, si lo pienso ahora, parece que si...
Nada de preocuparme por otros, nada de volverme loca cada vez que una amenaza se eleva sobre el mundo, nada de estar confusa, herida o deseosa...simplemente nada...
Se que no puedo volver a ese estado, no después de todo lo que he vivido, al menos no por mi cuenta...pero...quizás haya un modo de hacer que todo lo que ahora me agobia desaparezca para siempre. Después de todo, una vez conocí a alguien que conseguía deshacerse de todos estos sentimientos con cierta ayuda...
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