sábado, 18 de junio de 2016

viernes, 3 de junio de 2016

Posada en Kharazan!

Junio, 2016

Hoy he caminado desde Bosque del Ocaso hasta Ventormenta, en compañía de "La Rubia". Deberíamos haber parado en el camino, pues con el niño se cansa bastante. Ella dijo de alquilar un caballo, mas en su estado no creo que sea seguro que se monte en nada...


Intentábamos encontrar a "La Capitana", a quien no hemos visto desde que se marchó a Bahía del Botín, pero tras comprobar en el Cordero Degollado, el Ermitaño Taciturno resultó no estar vacío, aunque sin rastro de nuestra compañera.
Nos quedamos allí un rato, bebiendo un poco y charlando con algunos conocidos que terminaron entrando. También aproveché para darle al "Pistolero" ese libro de chistes que tenía en casa, a ver si pilla práctica. Así estuvimos hasta que "Busca Pleitos" propuso ir a Forjaz por simplemente dar una vuelta...como no teníamos mucho que hacer en Ventormenta, aceptamos.
Aún así, yo le habría recomendado a "La Pelirroja" que se quedara descansando tras el accidente en chopper que había sufrido. No es que fuera nada grave, pero los golpes en la cabeza siempre son peligrosos...de todos modos he seguido en mi línea de no ponerme demasiado pesada, por lo que al final nos fuimos todos juntos hacia el tranvía subterráneo.


No tardamos demasiado en llegar a Forjaz, donde nos dirigimos a la biblioteca en primer lugar, ya que "El Señor Pecoso" quería ir allí. Traté de controlarme y no mirar demasiado, hasta que encontré un libro que podría interesar al "Pistolero" y lo llamé para que lo viera, pues sabía que le interesaba el tema que trataba. No se lo había leído, y tampoco parecía quería sacarlo de allí por miedo a que le ocurriera algo. Me gustaría poder comprárselo...no puedo evitarlo, si veo que a alguien le interesa la lectura, me dan ganas de animarlo a que siga. Como cuando le regalé todos esos libros sobre embarazos y partos al "Señor con Coleta"...bueno, aunque en su caso más que por gusto era una necesidad...era...


Allí estuvimos un buen rato, mirando los libros, que no eran pocos. Me gustaría regresar de nuevo por mi cuenta a mirarlos con más calma...recuerdo que hace meses, cuando visité  Forjaz con frecuencia, apenas tuve tiempo de estar en la biblioteca esa...me gustaría remediarlo, ahora que no estamos de viaje.


Intentando no engancharme demasiado con las estanterías, salí a las salas exteriores, donde se exhiben algunos objetos, como por ejemplo un enorme astrolabio Altonato. Realmente era algo digno de verse, sobre todo por lo antiguo que parecía.
"El Pistolero" se acercó cuando estaba mirándolo, y me comentó algo sobre cierto mapa. Como no tenía ni idea a lo que se refería, lo seguí hasta la entrada de la sala...donde vi el mayor mapa que he visto nunca.


No fue hasta que me lo dijo que me fijé de los fallos; Pandaria, Rasganorte o incluso Exodar, no aparecían allí reflejados. Pero...seguramente se trate de un mapa con bastantes años, por lo que es comprensible que no esté actualizado. Aún así, mantengo lo que dije, deberían colocar cerca de allí un mapa actual, para que los visitantes puedan compararlos.


Tras observar el curioso fresco, nos dirigimos hacia Kharanos, ya que planeábamos pasar la noche allí. Intenté disimularlo pero...no tenía la ropa adecuada y me estaba congelando, literalmente. Me alegré más de ver la posada que de llegar a casa cuando era niña.
Allí nos sentamos junto al fuego, para entrar en calor...aunque sin capa y con esos pantaloncitos, el frío piso hacía poco para ayudar a relajarme. 
Pedí varias jarras de cacao con leche, y algunas galletas, pues sabía que a "La Rubia" le encantaría ese menú...y efectivamente, solo por ver como se le iluminaron los ojos, mereció la pena.

Canción escrita por "El Pistolero"
Otro que parecía incómodo era el niño, pues comenzó a darle hipo, molestando un poco a la embarazada. Le sugerí al "Pistolero" que le cantara algo, como la noche pasada, a ver si se calmaba...y de nuevo lo hizo. Me alegra que se esté soltando un poco, y más con la voz que tiene, realmente creo que podría llegar a ser un buen bardo si se lo propusiera. Fue agradable escuchar la dulce melodía mientras observaba el crepitar del fuego...

Cuentan los bardos la historia de un amor,
donde un príncipe, de una muchacha se enamoró
Él se llamaba Duncan, a ella Jenny su padre la llamó,
ambos bailaban en los bosques, el príncipe y su perdido amor

Oh, Jenny, ahora vaga llorando por su amor, 
Oh, Jenny, ya no volverás a sentir su abrazo

Duncan desafió a su padre, el gran y poderoso rey
Jenny le contó a su madre, que le dijo que lo olvidara
El reino sangró, la guerra la tierra cubrió...
Y Duncan y Jenny, se juraron eterno amor

Pero el fuego y la magia de aquellos seres que el amor no soportan,
atacaron el castillo donde su padre mejores tiempos añora,
Duncan a su padre no logró salvar,
y Jenny, con sus lágrimas, el fuego no logró apagar

El tiempo ha pasado, los reinos se han caído, 
la tierra ha cubierto las ruinas...
Pero las estrellas recuerdan, y allí, en salones de reyes ya olvidados,
la pobre Jenny baila con sus fantasmas,
recordando un amor, que a este mundo la ata


Tal y como dije, siempre me ha parecido curioso que la mayoría de historias o canciones tristes siempre tengan que ver con el amor.
Al poco "La Rubia" se fue a dormir, cansada, y yo me quedé sola con "El Pistolero". Claro, que primero ella me dio un beso en la mejilla, antes de irse, y...no es algo que pueda controlar, simplemente me sonrojé. Y mi compañero de fogata no hizo mucho por mejorar el asunto al señalarlo tanto...cuando estás colorada y te dicen que lo estás, lo normal es que te pongas aún más roja, y pese al frío, no me agradó sentir ese calor en las mejillas mientras él se seguía riendo.
Hablamos de varias cosas...antes había sacado el tema de jugar en la nieve, experiencia que viví por primera vez en Rasganorte, y él había comentado sus juegos de niño, con bolas de nieve y amigos, de un modo que sonaba muy feliz. Terminó diciendo que cuando se es niño nada ni nadie puede hacerte daño, al parecer...no voy a negar que eso me deprimió un poco, pues aunque siempre eché en falta ciertas cosas, no ha sido sino hasta que salí de Ocaso, que he podido ponerles nombre con mucha más claridad...
A parte de eso, me enseñó un libro que tomó "prestado" de la biblioteca...uno al que le pude echar un buen vistazo y que me gustaría leerme por completo, aunque sea por curiosidad.
También...me explicó lo que era su anillo, o al menos una parte, pero justo entonces llegó un grupo de viajeros a la taberna.


Se unieron a nosotros, contando alguna anécdota, pues afirmaban ser viajeros. Sin embargo, había muchas cosas que yo necesitaba preguntarle al que podría haber sido mi asesino, así que al verlo bajar a su cuarto, no pude evitar seguirlo, llamando a la puerta, por si realmente se fuera a acostar.
Me invitó a pasar y...bueno, lo cierto es que me respondió a bastantes cosas, aunque se notaba que le costó mucho hacerlo...tal vez aprecio más la información por eso mismo.
Tras un rato de charla y preguntas varias, terminamos haciendo un trato del que espero seriamente no arrepentirme nunca...él me contaría su historia, si yo le contaba la mía, eso si, dentro de tres días. He terminado aceptando por que...no puedo evitarlo, me da mucha curiosidad saber cómo terminó siendo lo que es, y a parte creo que eso podría ayudarme a formarme una imagen más exacta de su persona.
De todos modos...¿Qué es lo peor que podría pasar? Si le contara lo que yo le diga a otros...no considero que esté mal negarlo, pues él habría faltado a su palabra. Y de todos modos, si lo que pretende es sacar información...sobre lo que voy a hablarle...realmente eso no le sirve para nada, y si su verdadero objetivo es él...pues adelante, aunque sería un suicidio.
Realmente espero no arrepentirme de este trato...lo que si tengo claro es que no voy a perjudicar a nadie más, si la única solución es terminar con todo...pues que así sea.

Corto Interludio!

Junio, 2016

Al salir de mi "sesión" en La Catedral, me encontré con un gnomo que parecía pensar que necesitaba ayuda...teniendo en cuenta que aún no se me ha curado el moratón del ojo y que apenas he dormido, no puedo culparlo...


También me crucé con "La Pandaren Sanadora" y "La Pelirroja". Esta última venía de tener una cena con el hermano mellizo de "La Noble", y no parecía muy contenta. El chico le había propuesto trabajo, y ella estaba algo ofendida por eso...supongo que tiene sentido, creo que ella se esperaba una cena romántica, y encontrarse con una oferta laboral no es lo más usual en esos casos.
"La Capitana" se nos unió, así como "El Pistolero", y tras la marcha de la pandaren y "La Pelirroja", decidieron ir ha donde me dirigía yo antes de encontrarlos...el cementerio.
Entiendo que muchos no comprendan por qué me gustan tanto, pero es que...el de Ventormenta es muy distinto al de Bosque del Ocaso. En él todo parece en calma, y desde mi lugar favorito puedo escuchar incluso la campana que avisa de que un nuevo barco ha llegado al puerto, el sonido del viento que mece los rosales del lugar, el breve choque del agua al moverse los peces en los pequeños estanques...y todo eso acompañado de la usual tranquilidad que invade esa zona.
Pero, dejando mis gustos personales a un lado...una vez allí nos topamos con una especie de...estilista, nueva en la ciudad, que nos metió un discreto, pero evidente, repaso al "Pistolero" y a mi. Nos ofreció sus servicios, y aunque yo no creo que vaya, si que se lo comentaré a quien le interese.
También recuerdo cierta bromita que hizo "El Pistolero"...algo sobre que los magos tenían muy en cuenta esas cosas, y al decirle que no todos, me miró y dijo "Hablaba de magos, no de brujas". Lo miré mal unos segundos, aunque ante su intento de arreglarlo aclarando que no se refería a ese tipo de brujas sino a las "locas y con problemas mentales..." no pude sino reírme.


"La Capitana" se marchó también, y aproveché el quedarme a solas con "El Pistolero" para pedirle que me enseñara el funcionamiento de sus pistolas, y accedió a hacerlo. Eso si, no me ha dicho de dónde las ha sacado...pero bueno, algo es algo. Me da curiosidad saber la historia que hay tras su comportamiento, del mismo modo que me generaba curiosidad todo lo concerniente a "La Capitana"...solo espero no terminar igual.
Luego de eso tuvimos un pequeño problema con "La Pelirroja"...me llamó por el transmisor y escuchó una broma que hizo él a su costa, y a mi secundándola...pero francamente, no pensé que se la fuera a tomar tan mal. De todos modos, al final las cosas pudieron solucionarse, de alguna forma, y terminamos cenando en la terraza de la casa en que se queda ella.


Aunque...no voy a negar que a veces ciertos conflictos me...estresan, por así decirlo. Es que...a veces me siento como si no tuviera tiempo para ser yo la que se derrumbe...que eso se supone que es bueno, porque derrumbarse es un signo de debilidad, pero...no se...siento que me estoy cansando más rápido de lo que pensaba...

Mariscada y Reencuentros!

Mayo, 2016

Durante el viaje, pude hablar mejor con ese supuesto bardo...claramente, oculta demasiado...


Pude observar mejor el brazalete que lleva en la muñeca, y encontré una runa que anulaba la magia que desprendía...eso tras hacerse el loco en temas de magia. En cuanto la quité pude notar como las gemas brillaban...con magia vil. No se quién demonios es este tipo, pero bien podría ser un brujo en busca de algo peligroso. ¿Qué hacer? Si dejo que se vaya por libre sabré todavía menos y podría incluso perjudicarnos, pero teniéndolo cerca...tal vez pueda averiguar más y evitar que haga algo desagradable.
Quiere que lo ayudemos a erigir una tumba para su caballo, en Bosque del Ocaso, al oeste...según él, quiere que sea algo humilde, pero teniendo en cuenta las bolsas de oro que se pasa soltando y lo caro de sus vestimentas...de humilde tiene lo que yo de sacerdotisa.


Atracamos en Ventormenta, y tras despedirnos esperando viajar nuevamente juntos, tomamos caminos separados.
Terminé sentada cerca del cementerio con "El Pistolero". Charlamos durante un rato y además recibimos el aviso, por parte de nuestra última clienta, de que el cazador irritante que encontramos en Rasganorte vino con nosotros, como polizón. Ese hombre va a devolverme el dinero del pasaje cueste lo que cueste...


No tardamos en irnos a El Cordero Degollado, donde disfrutamos de una cena generosa con varios de los miembros del grupo que nos acompañaron al viaje. Me alegró ver que "El Pistolero", aunque se ve que le cuesta, intentaba...bueno, estaba sentado y hablando algo, que ya es mucho. También intentó un chiste pero...aún sigo sin entenderlo, eso si, me hizo gracia ver que lo contaba como si lo estuvieran torturando.


Lo malo fue que...me emocioné demasiado al ver a "La Capitana" y "La Rubia", pero realmente las había extrañado. Al menos el ver a "La Bardo" achispada a causa del dolor por la muerte de su esposo, me hizo entrar nuevamente en razón...
Fui tras ella, ya que me daba miedo que le ocurriera algo, pero al final fue "El Pistolero" quien se quedó con ella, creo que han terminado haciendo muy buenas migas desde que hablaron en la taberna de Rasganorte.


Regresé al Cordero Degollado y me puse al día con las chicas, contándoles un poco sobre el viaje y escuchando lo que habían hecho durante el mismo. "La Capitana" no tardó en irse, pues quería regresar a Bahía del Botín para hablar con Grizzly y tomar algunos ingredientes de la isla...no me gusta que regrese a ese horrible lugar, pero tampoco me creo con el derecho a impedírselo.


"La Rubia" y yo nos sentamos junto al pozo, a pasar el rato disfrutando simplemente de la compañía mutua. Se nos unió "El Señor del Parche en el Ojo", que estaba con su hija en brazos...una extraña imagen verlo con cara de atontado mientras la miraba...y más con el whisky que tenía en la otra mano.
"El Señor Pecoso" se acercó a nosotros, junto a "La Pelirroja". Los vi bastante unidos durante el viaje...me pregunto si tienen algo, aunque francamente, no voy a meterme en nada de eso, ni siquiera para preguntar.
Se fueron bastante rápido y el tuerto, "La Rubia" y yo, aceptamos la invitación del primero para ver ese supuesto taller de choppers que tienen en el Distrito de los Enanos...taller que siempre he pensado que se trata de una tapadera para algo más...


Mi compañera sujetó a la niña, mientras su padre se dedicaba a enseñarme una chopper algo destartalada, pero que esperaba conseguir por un buen precio. Llevo mucho tiempo queriendo una, aunque todavía no sepa montarla...sin embargo, no se le ocurrió otro modo de demostrarme lo resistente que era sino metiéndole un tiro, con el consiguiente ruido y atronador llanto de su hija.
Alertado por el sonido, "El Pistolero", que pasaba por la zona, terminó acercándose preparado para disparar si fuera necesario y preguntando por el maullido que sonaba.
Al final se nos terminó uniendo, y el tuerto intentó incluso venderle a él el vehículo, pues a mi 6500 doradas por esa chopper me parecía excesivo...tampoco tuvo suerte con él.


Terminamos yendo a mi casa, en Ocaso. No me importó demasiado que el tuerto viniera, pues pronto Yara y Mabel supongo que se mudarán a las que en teoría se están construyendo...y de todos modos, él no podría entrar en mi casa si yo no quisiera, puede que sea un cuchitril, pero eso no significa que no esté protegido.
Aprovechando que "El Pistolero" había comentado de broma que le gustaría montar en un dragón, le presenté a Shei...y aproveché para llevarlo a dar su primer viaje en él, dejando de paso a "La Rubia" y "El Señor del Parche en el ojo" solos...por dos motivos; primero, porque pensaba que les haría bien estar solos...y segundo, porque si ella va a ir a esa extraña cenita familiar sola, lo mejor es que me acostumbre a entender que puede defenderse por sí misma, pese a estar en cinta...realmente sigo sin creerlo, pero no puedo continuar como antes.
Al final de la noche, "El Pistolero" se animó a cantar algo para que la niña se durmiera...consiguiendo que tanto ésta como su tía cayeran fulminadas. Como yo dudo que me atreva alguna vez a sostener en brazos a uno de esos, le pedí por favor que se encargara de la niña...y lo hizo.
Mientras yo arrastraba a "La Rubia" como podía hasta dejarla acostada en el jergón, él se sentó en el suelo con la pequeña en el regazo, mientras seguía tarareando una suave melodía...ha sido bastante raro verlo así, e inesperado. Él afirma que era la primera vez que sostenía a una niña en brazos pero...viendo cómo se desenvolvía, lo dudo mucho...