Esto apareció junto a mi esta mañana, al despertar...
Es él, estoy segura...del mismo modo que se que la rosa es cosa suya. Pero ¿por qué? ¿a qué viene el interés?. Cuando nos encontramos no parecía querer hacerme un regalo, precisamente.
¿Qué fue lo que escuché en el sueño aquel...?
He revisado el diario, encontrando la página :
- Todas las rosas tienen espinas, corderito...no puedes tomar lo bueno, sin aceptar lo malo...
La rosa...desde que apareció las heridas causadas por él se han curado...ya ni siquiera tengo marcas. Ayer Chispancio me preguntó por ellas, pero no pareció creerse la excusa que le di, acerca de un sanador de la luz bastante poderoso.
La rosa...¿por qué querría ese elfo curarme, cuando fue él quien me hiriera?. Antes de que Shei me sacara de allí, juraría que iba a descender hasta el pie de la colina para acabar conmigo, pero...¿y si no era así? ¿qué pasaría si su objetivo era, una vez debilitada, llevarme con él? ¿qué oscuro propósito podría tener?...quizás quisiera usarme como moneda de cambio para el grupo de magos, aunque dudo que aceptaran...o quería volver a intentar que me uniera a su causa...pero no me cuadra, mi magia no es tan poderosa como para generar ese interés...
Lo que está claro es que mis problemas se multiplican, como si no tuviera bastante con el pasado de mi Abuela y la incertidumbre de mi familia, ahora encima tengo a un elfo con rasgos de psicópata pendiente de mis movimientos.
¿Habrá dejado él mismo la carta? Solo de pensarlo me entran escalofríos...¿habrá mandado a alguien en su lugar? Eso significaría que tiene secuaces dentro de la ciudad...¡maldita sea! Como si necesitara estar más paranoica.
Creo que necesito tomar algo...debo calmarme y pensar las cosas fríamente...he de averiguar más sobre este individuo, cueste lo que cueste...
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